– 2 latas (800 ml) de leche de coco en lata, refrigeradas durante al menos 24 horas
– 1 taza de leche de almendras (o cualquier otra leche vegetal)
– 3/4 taza de azúcar de coco o azúcar de caña
– 2 cucharaditas de extracto de vainilla
– Una pizca de sal
– 1/4 taza de hojas de menta fresca, finamente picadas -1/4 taza de fresas y arándanos picados
1. Abre las latas de leche de coco refrigeradas y retira con cuidado la parte superior sólida, dejando el líquido restante en las latas. La parte sólida es lo que usaremos para hacer el helado.
2. En un tazón grande, bate la parte sólida de la leche de coco con una batidora eléctrica o manual hasta que esté suave y esponjosa, como la textura de la nata montada.
3. Agrega la leche de almendras, el azúcar de coco, el extracto de vainilla, la pizca de sal y las hojas de menta picadas al tazón con la leche de coco batida. Mezcla bien hasta que todos los ingredientes estén completamente incorporados y la mezcla sea suave y cremosa.
4. Vierte la mezcla de helado en un recipiente apto para congelador y cubre con papel film o una tapa hermética para evitar la formación de cristales de hielo.
5. Congela la mezcla durante al menos 4 horas, o hasta que esté completamente congelada.
6. Cuando esté listo para servir, retira el helado del congelador y deja que se ablande ligeramente a temperatura ambiente durante unos minutos antes de servir.
7. Sirve el helado de vainilla vegano con hojas de menta en conos o cuencos y disfruta de su delicioso sabor cremoso y refrescante.
¡Espero que disfrutes de este delicioso helado de vainilla vegano con un toque de menta! Las hojas de menta añaden un aroma fresco y un sabor extra refrescante a este postre cremoso.
«Pan de mantequilla: tierno, indulgente y lleno de sabor cremoso.»
«Pan integral: saludable, nutritivo y deliciosamente satisfactorio.»
«Baguette: crujiente por fuera, tierna por dentro, perfecta para acompañar.»
